jueves, enero 31, 2008

DÍA DE PAZ


Ayer día 30 de enero celebramos, al igual que todos los años, el día de La Paz.

A los chavales les gusta un montón, porque no pegan ni golpe, se pasan todo el día haciendo otras actividades, a saber:

A primera hora vieron una película o mejor dicho un documental sobre el respeto a las diferentes creencias y formas de vida; a esto le siguió un coloquio sobre la intención del documental, y me sorprendió al ver que casi todos lo habían captado, aunque a algunos, aunque lo habían entendido, no les gustó , decían que era “aburrido” y hubo alguno que decía que prefería Rambo ¡El día de la Paz!.

Después colaboraron en la realización de un mural en el que todo el ciclo, 5º y 6º plasmaron el sentido que para ellos tenía ese día, la verdad es que quedó muy bonito y ahí esta la prueba, pongo la fotografía.

Y como colofón del día se hizo un acto con todo el alumnado del colegio, en el patio, en el que cada ciclo leía o cantaba algo alusivo.

Mis alumnos cantaron el Himno al Alegría de Miguel Ríos para darle un sentido positivo a las esperanzas de entendimiento entre todos los hombres y leyeron un manifiesto estupendo y muy conseguido.

El acto termino con todos los alumnos cantando y bailando al unísono una canción.

Los padres se lo pasaron bomba detrás de la verja, mirando y cantando a la vez que sus niños.

Yo acabé “matá” como vulgarmente se dice, porque esos días trabajo más que un día cualquiera, en el que ellos están más controlados y no tan alterados.

Ya veremos si queda algo de poso de todo lo que hemos querido transmitirles, porque cuesta mucho que dialoguen para resolver conflictos.

martes, enero 22, 2008

HOY ESTOY DE BAJÓN

Hoy he salido algo cabreada de clase, y os preguntaréis por qué, pues bien, os lo voy a contar.

Al punto de la mañana y cuando aún no me he quitado ni la chaqueta, ya tengo a dos o tres alumnos dándome el “parte”

- Seño, se me han olvidado los ejercicios.

-Profe, me he dejado el cuaderno en mi casa.

-Profe, no me he traído la carpeta con las fichas.

Y así, el día lo empiezo ya un poco “tocada” aunque no quiera, porque, ¿cómo voy a trabajar si una parte de la clase no se trae el material o no realiza las actividades?

Después, cuando me pongo a corregir en la pizarra los ejercicios y por curiosidad me voy dando un paseo mirando los cuadernos, ¡cielos! Hay otros dos o tres que tampoco se han traído el trabajo o no lo han hecho, y se han callado cual zorros para que no me entere y les ponga a caldo, con lo cual me pongo ya como una moto y les echo la filípica a todos.

Hoy, creo que me he pasado y les he dicho de todo para ver si espabilan los poco trabajadores, pero luego miré a los que se rompen el espinazo a trabajar y he tenido que parar para decirles que la cosa no iba con ellos, aunque la cara que ponían los pobres era un poema.

Así que he decidido que no voy a pegar la bronca a toda la clase, porque no quiero que los buenos estudiantes tengan que oir las regañinas que les echos a los vagos de siete suelas, y de aquí en adelante sólo lo haré a aquellos que sean merecedores de ella y cuando la parte trabajadora no esté delante, ya veré como me las apaño.

Después de todo, hay alguno que a pesar del broncazo aún viene y me cuenta su vida, y tengo que hacerle una caricia, y es que en el fondo son chicos muy majos aunque bastante flojos.

Siento daros la vara, mañana seguro que cuento alguna gracieta que hay muchas, lo que pasa es que se me olvidan.